martes, 11 de marzo de 2008

Serpientes y escaleras de las ventas telefónicas

-Buenas tardes, me comunica por favor con la señora Juana San Millán, la llama su servidora Nadie López de Grupo Invierte. ¿Es usted la señora San Millán? ¡Mucho gusto señora! ¿Cómo que no le interesa?, si aún no le he dicho por qué la he llamado a parte de saludarla con mucho aprecio. Mire, el motivo de mi llamada es para informarle que a partir de este momento usted puede contar con los beneficios de un programa de protección integral para su familia y su…-
Debes admitirlo ya. Eres nefasta vendiendo. El pizarrón blanco de la oficina, en donde están los nombres de tus compañeros de trabajo y el tuyo para anotar las ventas del día, lo confirma. El promedio más bajo en ventas y la negativa segura a la renovación de contrato. Un nuevo periódico que comprar, un nuevo empleo que buscar.
-¿Era Beto mamá? El desgraciado no me ha llamado en toda la semana..
-No era ni tu Beto ni persona alguna interesante, sólo una fastidiosa disque para venderme un programa de no sé qué liendres. ¡Ay pero que bien chiflan por teléfono! ¡Qué no pueden entender si debo hasta la mierda que defeco, obviamente no me interesa otra absurda tarjeta de crédito! Y que no necesitamos ningún seguro con doscientas restricciones, ni vacaciones en el paraíso, ni casa en la luna. ¡Nii naadaaa!
-Está…bien mamá, ya entendí. Sí habla Beto me avisas.
-Lo siento mucho, Nadie, pero no cumpliste con la meta de ventas y tu contrato no puede ser renovado. Tienes muy bonita voz y mucho talento, pero como no te pones las pilas, ni modo.
- Yo sé que mi desempeño no ha sido el mejor, pero…
De nada sirve que te desgastes en explicaciones que sólo te harán parecer más estúpida de lo que eres. ¿Para qué quieres explicarle a esta güera falsa, que en su vida ha hecho una venta telefónica, que ya habías subido tu promedio de ventas a dos diarias en los últimos tres días? O que necesitas mucho el empleo y por ello mejorarás. O suplicarle que te pase al departamento de atención a clientes, donde no tendrías que irrumpir en la casa de ninguna persona que no desea comprar nada: tan sólo con contestar llamadas de clientes interesados en comunicarse con la empresa y responder sus dudas puedes solventar tus gastos honradamente.
Ya lo sabes, Nadie, es por demás, esta tipa que se dice tu jefa no lo entenderá. Mejor lárgate de allí dignamente, como lo hiciste en Hoteles Zapoteca Resorts, o en la intermediaria, COROCO, es decir, Convencidos de Robarte tus Comisiones S.A de C.V.
Entre los pequeños anuncios que dicen estudiantes, medio tiempo, $20000 semanales, Licda. (Sic) Encarnación de la Purísima Madre, y los que piden que llames si eres un chico ardiente en busca de una colegiala perversa dispuesta a todo, encuentras uno que te interesa porque asegura ser una empres líder en su ramo que contrata inmediatamente a gente de todas las edades, de todos los sexos, de todas las escolaridades y de todas las talles para labores de oficina, turno completo y medio tiempo, experiencia no necesaria, con bonita voz y gusto por las ventas, que quieran ganar más de $80000 mensuales. Ofrecemos prestaciones superiores a las de Ley. Interesados presentarse con solitud, fotografía y excelente presentación a…
-Bueno. Buenas tardes. No se encuentra, ¿de parte de quién? Pues me llamo María Paulita Juana Reverdes San Millán, pero soy la “Marypaju” pa’ los cuates. Apenas cumplí los dieciocho, ¿por? ¿Vacaciones al infinito y más allá, neta? Ah, ¿para toda la familia? ¿Se paga en el recibo de teléfono? Oiga, señorita Nadie López, ¿así me dijo que se llama verdad?, pues se oye súper chido, pero fíjese que ahorita no están mis papás, y si yo le doy los datos, para que quiere, mire mejor hable en un ratito y segurito que mi mamá acepta…
Tres horas después.
-Señora, Juana San Millán, que gusto conocerla. Mire, supongo que su hija María Paulita, ya le comentó. Por cierto esa chica es un encanto… Ah, ¿no le platicó? Bueno no se preocupe, señora San Millán, no hay ningún problema que para eso estamos verdad… ¡Noo señora, no se enoje! Yo le explicaba su hija que es una paquete invaluable, con vacaciones totalmente pagadas al infinito y más allá con cargo a su recibo telefónico IVA incluido… ¡Señora San Millán, yo no le he faltado al respeto y le pido que no involucre a la autora de mis días en esto! ¡Entienda de una vez por todas, a mí también se me retuerce el hígado cada vez que en su pobre casa, suena el teléfono, porque no crea que es usted la única, y es Fracasado Vargas tratando de vender la mismísima alma del Demonio de Tasmania, o el mejor dildo último modelo, o hasta de condones de alta calidad. Pero son los empleos más fáciles de conseguir, al menos para sobrevivir el mes de prueba. Si no quiere recibir más llamadas de este tipo, pues corte el cordón del teléfono y de paso ahórquese con él. Fue un placer atenderle señora Juana San Millán, le reitero mi nombre, Nadie López de Viajes el infinito y más allá. Que pase una excelente tarde.
Cual serpientes y escaleras, vuelves a comprar el periódico.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Genial, preciosa, puramente genial, me ha gustado bastante tu escrito y es de risa loca, genial, en fin suerte en todo un beso enorme y un te extraño.
Chucho...